La Provocadora
Autora de 20 libros, experta en visibilidad femenina, motivación, liderazgo y redes sociales.
Coach ejecutiva y de equipos certificada y máster en RRHH, es empresaria y conferenciante, profesora de postgrado en la Universidad de Cantabria y está considerada una de las grandes poetas españolas contemporáneas.
Hija
de aristócrata y “pijipie” por naturaleza e inspiración (a la que le decían que no parecía de la familia); soy motera y practico el deporte y la creatividad como forma de vida. Amante de la bicicleta y muy peleona de niña y adolescente (incluyendo manos y pies).
Llorona
a escondidas y febrilmente apasionada del “sentir” (hasta doler), mi primer negocio lo fundé a los 11 años, junto a mis hermanos, y sería el principio de una feroz atracción por el mundo empresarial.
Estudiante de estilismo
durante 5 años, con la especialidad en diseño de moda y joyería, mientras trabajaba en televisión de corista con cantantes como Luis Miguel, La Unión, Carlos Mata, Joe Cocker… etc. Con Luis Miguel hicimos toda la gira por España, algo apasionante para una chica de pueblo que aún se perdía en el metro, y a Julio Iglesias le dije que no porque estaba de vacaciones con mi pandilla en Galicia (mi madre nunca me lo perdonó).
Modelo
desde los 12 años y con cierta áurea de rara e introvertida, no distinguía, a veces, si vivía en el mundo que mi padre y mi madre habían creado para sus 7 hijos e hijas, o en el que me inventaba cada día en esa casa palacio en la que me crié más cerca de mi abuela y de la luna que de la tierra. Bendita dama renacentista que me amamantó con grandeza, respeto y elegancia.
Creyente
por educación en el amor romántico (craso error) y utópica por imitación del padre que me engendró, que siempre me retaba a estudiar más y más, soy feminista tardía pero convencida cuando conocí́ su valor hacia la sociedad y su significado: igualdad de derechos y oportunidades para las mujeres y los hombres.
Obsesiva
con la lectura y la pintura desde niña, mis amigas me escondían los tebeos para que jugara con ellas. Escribo, cada día, desde los 10 años como sanación. Hoy ya tengo el oficio y puedo plasmar en prosa o en verso lo que mi corazón y mi alma me gritan. Incluso, lo que me susurras o gritas tú sin apenas hablarme.
“
Adoro a las mujeres sencillas que se ríen a carcajadas y que me abren sus casas y me invitan a vino, queso y pasteles. Me pierdo cada vez más en nuestra casa de la montaña, en la Sierra de Segura, en la que no hay conexión a internet y escribo, subo montañas y pinto poesía sin control.
Un salvajismo muy a mi medida y cada día de mi existencia, desde que la pandemia azotó a este corazón preñado de flores y le arrasó unas pocas amapolas, a las 20,30h. celebro la vida con un botellín o una copa de vino y unas aceitunas de Jaén. Esté donde esté…
Durante cientos de miles de años escondí́ mi historia (también soy muy exagerada, como ves) porque los hombres que me rodeaban (sobre todo, mis hermanos, que como me leen poco, puedo contar secretos y no se van a enterar) me dijeron que era frívola y no me dedicaba a nada “serio”.
”
Hoy me siento una mujer completa y presumo de mi origen e historia porque sé que toda la vida me he estado preparando para lo que ahora soy y siento. Para vivir el presente con una pasión y alegría inaugural cada mañana y para poder ayudar a tantas mujeres a ser visibles, primero, por dentro y luego, por fuera. A quererse por encima del bien y del mal y de la opinión ajena. Por eso puedo entrenar, de manera individual o en grupo, a mujeres para trabajar su visibilidad.
Hoy, que sé que somos el recuerdo que dejamos en las demás personas, tanto “on line” como “on piel”, ayudo a empresas y a sus equipos a que su marca personal sea humanista, porque a mayor tecnología, más necesidad tenemos de humanizarla.
Soy nómada y adoptada digital, por lo que me encontrarás en todas las redes sociales (eso sí, no tengo whatsapp, porque no podría contestar a todos los mensajes y mi madre me regañaría todo el tiempo por no atender como merecen a las personas que me escriben).
Estaré encantada de recibirte en mi «nubedespacho» virtual y, desde allí, esta fábrica de alas que regento, te dará la bienvenida.
Te invito a mi web. Iré calentando el té con pasteles para ti. www.yolandasaenzdetejada.com